Es ser canal, ser instrumento, acompañar procesos, dar luz, dar forma, dar visión, es estar, es ser, es compartir, convivir, es apoyar, materializar, reflejar, es admirar, es crecer, aprender, es reír juntos, es creer, es luchar, inspirar, es sentir, es la vida y una mirada.
Entendemos la pieza audiovisual como un delicado trabajo artesanal que entrelaza la relación entre el arte y la máquina como instrumento.
Nuestras piezas gozan de un carácter que se debate entre lo delicado y lo grotesco en una fogosa búsqueda de equilibrio.
En una búsqueda incansable por descubrir nuevas formas de contar historias a través de la luz, de la voz, la expresión, la experiencia… Nuestros proyectos siempre tienen detrás un gran equipo humano que nos alienta a seguir haciendo de canal para dar visibilidad a tantas realidades que merecen ser expuestas.
Nos gusta recordar el valor del trabajo físico en la técnica de los medios. La fina ejecución de la técnica en el instrumento a través de las manos garantiza la maestría en la ejecución.
Las manos son, con diferencia, las herramientas más preciadas del humano, a través del cual se canaliza, da forma, se ejecutan innumerables disciplinas en las que nuestra especie se demuestra virtuosa.
En una oda al reconocimiento de estos instrumentos supremos, las ponemos en valor y las colocamos en el lugar que merecen.
Compañero fiel del creador, el instrumento es testigo de nuestro camino.
A veces de la mano y otras de espalda, estos utensilios de obligada presencia se instalan en nuestras casas y oficinas. Abusando, a veces, de protagonismo.
El instrumento carece de humildad, y dado su carácter arrogante, necesita de un creador templado que resista los envites y haga del litigio una corriente a su favor.